El síndrome posvacacional suena como una de esas enfermedades raras de la modernidad. Pero no es más que una serie de manifestaciones que se presentan ante la necesidad ineludible de volver a la rutina de todos los días; readaptarse al trabajo o a la escuela después de haber tenido, como única “obligación”, pasarla bien.
La inadaptación a los deberes de cada cual se puede reflejar en el rechazo o la desidia con la que se acometen las tareas y, en casos más agudos, si éstas son particularmente estresantes, en irritabilidad, tristeza, apatía, ansiedad, insomnio, dolores musculares y hasta trastornos estomacales.
El desajuste de horarios es la principal causa del síndrome posvacacional, seguida del cambio en el ritmo diario, el regreso a la tensión propia de la vida actual y el brusco rompimiento de la tranquilidad y el relajado desorden vacacional. Entre más prolongados sea los días de descanso, más agudos serán los malestares al estar “de regreso en la realidad”.
¿Padecen el síndrome?
Estos son los síntomas o alteraciones más frecuentes:
-Debilidad generalizada, con dolores musculares, fatiga ante esfuerzos menores y pérdida de apetito.
-Dificultad para dormir por la noche y somnolencia a lo largo del día.
1 comentario:
yo tengo ese sindrome! no puedo dormir :( aunque empece clases hace un mes, pero yo tambien sufro del sindrome de captado lento
buen blog!! ^^
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